La vidriera refleja el estilo del local, les da un mensaje a los clientes, genera intriga y los invita a ingresar al negocio. Una vidriera atractiva será un puntapié para aumentar tus ventas.

Si renovaste tu vidriera y tu clientela disminuyó, será fundamental que revises paso a paso cada una de las desiciones que tomaste para componerla porque probablemente no lograste generar el efecto visual adecuado para atraer a los transeúntes.

vidriera

Te damos algunos tips para que puedas renovar correctamente tu vidriera, respetando los principios y criterios del visual merchindising:

Cómo elegir los productos a exhibir?

La vidriera no debe ser un luegar estático, sino un campo de trabajo a través de la prueba y el error. Si un producto exhibido no tiene movimiento al interior del local y otro se convierte en la estrella de tus ventas, debés considerar el cambio. Recordá que la vidriera es el primer punto de contacto con el cliente y lo primero que le muestres generará su entuasiasmo o su indiferencia.

La mercadería que elijas será la base de la atracción visual. Por eso te recomendamos seleccionar aquellas prendas que tengan mayor fuerza en color, diseño y estilo. No todo va a sobresalir. Si querés destacar un producto combinalo con otros más neutros, armá una propuesta completa con un conjunto en el que una prenda se destaque y las otras acompañen.

Salvo que hablemos de una liquidación de temporada en la que el mensaje será “Llevate todo“ y apelemos un poco al desorden o a la exhibición de los productos en liquidación, te recomendamos exhibir dos o tres conjuntos, según el espacio de vidriera disponible.

Cómo elegir los colores en la vidriera?

Te aconsejamos trabajar con 3 colores, uno dominante, uno subordinado y otro que se aplique solo a los detalles. El color debe elegirse teniendo en cuenta la gama de la marca, la decoración del local y la mercadería que quieras exhibir. Mucho color puede opacar la mercadería. Recordá que lo que debe atraer la atención es el producto, el resto estará para contextualizarlo, dar un mensaje, transmitir una sensación y acompañar al producto en la exhibición.

Cómo componer el espacio?

El espacio debe componerse con un orden y un sentido, proponiendo un recorrido visual armónico, en el que los elementos no compitan entre sí, sino que se complementen formando un todo con un mensaje potente. Para componer una vidriera debés primero elegir el punto que vas a resaltar. Este será el punto focal principal. Luego, alrededor de él, podés colocar detalles que lo acompañen sin opacarlo, es decir, dándole fuerza sin quitarle protagonismo. Si tu punto focal es un maniquí, podés dale contexto generando un ambiente a su alrededor con pequeños detalles. Una tendencia en auge es la naturalidad. Cuanto más natural sea la composición, más claro será el mensaje.

Podés acompañar tu vidriera con un texto escrito, por ejemplo, con un vinilo en el vidrio en el que compartas un mensaje de interés invitando a tus clientes a pasar y descubrir el interior de tu local.